Con tristeza en mi corazón y con mi mente saturada de tantas noticias negativas, no puedo dejar pasar la indignación que me produce la muerte de George Floyd. La humanidad está en guerra y cansada de tantos abusos.
A través de la historia hemos visto como el racismo, el discrimen y el odio a lo que se considera diferente ya sea por su raza, color, sexo, religión y hasta clases sociales, han mancillado al ser humano. George Floyd es el mas reciente ejemplo de brutalidad policiaca.
Los artistas, cantantes, personalidades de diferentes ámbitos deportistas incluyendo a futbolistas; hombres y mujeres han alzado su voz en contra del abuso cometido.
Jugadores de Alemania expresaron su protesta en el campo arrodillándose en una rodilla pidiendo justicia para Floyd. Condenan los actos policiacos y expresan que tenemos que unirnos en contra del racismo.
Son muchas las ciudades que se han lanzado a las calles en forma de protesta. Entre otras de las manifestaciones, la jugadora de la selección nacional de Estados Unidos, Carli Lloyd, publicó en sus redes sociales su sentir con lo que está ocurriendo a causa de la muerte de Floyd.

El prestigioso club del Liverpool adapta la iniciativa de Alemania con un mismo propósito. Exhortando a los demás de que todo se trata de la unión.

El racismo, discrimen y la falta de equidad es la razón de innumerables disturbios. También, el racismo en el fútbol es visible, tanto en el masculino y aun mas en femenino. Han habido partidos donde demuestran rechazo por tan solo ser de otro país, y mucho más por su color de piel.
Las féminas del fútbol han denunciado las injusticias que se cometen hacia ello. El menosprecio por tan solo ser mujeres, además de su raza y color de piel, es devastador.
El verdadero virus, el que no tiene medicamento, ni vacunas, ni distanciamiento social que le de un alto, es el discrimen.
El discrimen es el virus que vive en el corazón y en la mente de muchas personas.
¿Dónde está la tolerancia, la sensibilidad, la solidaridad? ¿Dónde están los valores y el amor a la humanidad?