Devastadora historia en la que muestra el desprecio vil y cruel en contra de las mujeres
¿Cuántas personas a nivel mundial aman el deporte del fútbol ya sea masculino o femenino? La realidad es que son multitudes los que siguen este deporte que genera gran adrenalina entre los espectadores. Sin embargo, en Irán la libertad que tienen las féminas son extremadamente limitadas y las leyes en su contra son absurdas y rigurosas.
Sahar Khodayari, fue detenida y encarcelada por tratar de entrar a un partido de fútbol donde su equipo favorito, Esteghlal, era uno de los protagonistas del juego. Fue descubierta cuando intentó participar de espectadora disfrazada de hombre. Hecho ocurrido en marzo del 2019, durante la Copa de Asía de la AFC. Días después de ser acusada y encarcelada, le dieron en libertad bajo fianza. La humillación fue tan fuerte que prefirió quemarse, noventa porciento de su cuerpo fue calcinado y no sobrevivió.
Esto provocó un gran impacto que atrajo la atención de futbolistas, políticos, artistas, entre otros dejando saber el sentir del repudio hacia los actos que constantemente sufren las mujeres en ese país.
Discrimen y horror que la FIFA y la Confederación Asiática de Fútbol deberían prohibir y tomar medidas estrictas para detener estas atrocidades. Cabe destacar que en una mínima ocasión han dejado que algunas mujeres participen de un juego, pero esto ha sido catalogado como acto publicitario. Yo diría que eso es un ejemplo de tapar todo el injusto trato a las mujeres en ese país.
Son más los despreciables maltratos que constante se han plasmado en noticias como la de Sahar. Y yo me pregunto, ¿cuanto más tiene que pasar para que se haga justicia? ¿Cuando será el día en que las mujeres sean tratadas con respeto y dignidad en todas partes del mundo?