¿Que sabía la Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF) al momento de contratar al Sr. Elgy Morales como técnico de nuestra Selección Nacional? Esa debe ser la pregunta que todos en el ámbito del fútbol local deben hacerle a la entidad que da un pasito para adelante y dos pasitos para atrás. Las revelaciones por este medio el viernes pasado en la noche son serias y deben ser trabajadas con la seriedad y el profesionalismo con el que se merece.
Si antes del viernes Morales debía haber sido cesanteado, ya hoy es intolerable su permanencia al mando de las Selecciones Nacionales. Se tiene que ir.
Pero eso no debe ser el fin de la historia. La FPF tiene que responder porque no se realizan investigaciones de trasfondo a sus empleados, particularmente a los técnicos nacionales; y no estamos hablando de un simple certificado de buena conducta.
Es secreto a voces que el actual presidente de la FPF, Iván Rivera, le ofreció el trabajo a Elgy Morales porque Morales fue su técnico en Puerto Rico Islanders Soccer Academy (PRISA). Y también es de conocimiento público que Morales hizo campaña por Rivera en las elecciones presidenciales pasadas. Esta administración federativa se ha caracterizado por ser una de contratar a los amigos del alma por encima de los que tienen capacidad para trabajar las diferentes áreas de la entidad.
De esta forma es que llega Morales a la Federación, sin cuestionamientos por su récord a nivel superior, ni por su trayectoria, ni mucho menos sin saber a ciencia cierta quien es. Es importante que tanto la Federación como los clubes comienzan a ser más rigurosos con sus políticas de reclutamiento y hagan el trabajo de investigar a quienes están contratando.
¡Basta ya de entrenadores que dicen ser algo y no lo son! Un entrenador es un modelo a seguir para sus jugadores, inspira, enseña y en ocasiones trabaja como consejero y psicólogo. Necesitamos mantener un estándar alto para con nuestros entrenadores, pero también para con nuestros directivos de fútbol federativo.
Entre Morales, entre la escandalosa aceptación de la candidatura y elección del Sr. José Luis Pérez violando los estatutos y código electoral, la violación de derechos de miembros afiliados, y un sin número de otros ejemplos merecen la renuncia o destitución de todos los miembros del Comité Ejecutivo que han dado rienda suelta a esta administración.
Fe de errata: en la versión original de este editorial se dijo que Morales fue el técnico de Rivera en Corozal. Esa información estaba incorrecta y se arreglo; fue su técnico en PRISA.
