Desde el comienzo de la temporada el FC Barcelona ha sido rodeado por muchas dudas. La directiva parece no andar haciendo las cosas muy bien y el equipo había sufrido la baja sensible de Neymar que se marchó al Paris Saint Germain. Lo único en lo que había acertado la directiva según la afición, había sido en el fichaje de Ousmane Dembélé. La fanaticada parecía haberse calmado un poco con toda la situación hasta que se enteraron de la noticia que les confirma que Dembélé estará de baja posiblemente hasta el 2018 por un grave lesión que lo mantendrá fuera por lo que queda de año.
Algunos pensarían que el mundo se va al suelo y que el Barça ahora caerá. Pensarán que no hay suplentes que valgan la pena y volverán los fantasmas de los fichajes frustrados de este verano. “Que no panda el cúnico”, como decía el Chapulín Colorado. Hay banquillo, hay cantera y hay soluciones. Ernesto Valverde siempre ha sido un técnico capaz de reinventar su equipo y adaptarse a las circunstancias. Ya lo vimos con el Athletic en La Liga.
Para mí, darle oportunidad a Denis Suárez es fundamental. Se juntaría muy bien con Don Andrés y le daría un dinamismo diferente al equipo. Si lo que desean es darle más explosividad, Gerard Deulofeu es el indicado, a pesar de que en ésta temporada no ha tenido mucho más que algunos destellos. Por otra parte, Sergi Roberto ha demostrado que es un tremendo comodín y que es capaz de jugar donde sea, razón por la cual no descartaría la posibilidad de que él fuera el elegido. De la cantera, Aleñá es una muy buena opción y ya tuvo la oportunidad de participar en una pretemporada en la cual no desentonó.
A fin de cuentas la decisión se basará en los estudios que realicen esta semana para determinar cuál es el camino a seguir, pues la realidad es que hasta un cambio radical en la formación se pudiera considerar. Una defensa de cuatro con los habituales, un doble pivote con Busquets y Paulinho, más adelante Denis, Rakitić y Messi dejando solo en punta a Suarez. ¿Sería una locura? Ya veremos cómo se resuelve toto esto, pero repito, “Que no panda el cúnico”.
Comentarios
