Sábado 24 de septiembre de 2011
Daniel Gambarrotti | España 360
Pese a la crisis futbolística que ha acompañado al Real Madrid en los últimos partidos, el equipo merengue logró una importante victoria ante el Rayo. Una victoria que sirve para restaurar la confianza en la plantilla y que la afición no pierda la fe en el club blanco. El encuentro disputado en la ‘Casa Blanca’ terminó con un resultado abultado a favor del Real Madrid. Pero no todo fue color de rosa para los de Mou.
Las gradas del Santiago Bernabéu no terminaban de sentarse y de aplaudir el arranque del partido cuando ya veían que su equipo estaba perdiendo. A los 15 segundos del partido aparecería Michu para marcar uno de los goles más sorpresivos en el Santiago Bernabéu. El asturiano marcaria su gol, luego de un paupérrimo despeje del Iker Casillas. Los murmullos de la afición merengue no tardarían en bajar. El Real Madrid se vio desconcentrado y falto de fútbol. Mourinho no tardó en hacer su primer cambio. Entraría al campo de juego el alemán Mesut Özil por el francés Lass. Para la media hora del partido, todo el Real Madrid estaba en el campo rival. Un dominio absoluto que muy poco tardaría en convertirse en gol. El Cristiano de Madrid, marcaría el primer tanto merengue, por medio de una jugada individual. Al ocaso de la primera mitad una jugada preparada le daría la ventaja al equipo blanco. Un centro de Xabi Alonso, Sergio Ramos hace un pase de cabeza al ‘Pipita’ Higuaín y el argentino le daría la ventaja al Madrid.
La segunda mitad arrancó como la primera, el Rayo acelerado y el Madrid desconcentrado. El Rayo atacaba pero no concretaba y en un descuido el Madrid logró un fulminante contragolpe que terminó en falta sobre Kaká, penal a favor del Madrid y CR7 marcando su segundo gol del partido. El Madrid seguía descuidándose y regalando jugadas de peligro. El asturiano Michu marcaría su segundo gol y el segundo del Rayo, luego de un tiro de esquina que la defensa Madridista no pudo rechazar. El Madrid sabía que no podía perder o empatar este partido, que estaba en deuda con la afición y con ellos mismos. El francés y zaguero central Varane marcaría uno de los mejores goles de La Liga en esta temporada, un disparo de esquina y el francés la mandaría al fondo de la red con espectacular taquito. A partir de ese momento la suerte estaría echada, Karim Benzema marcaria el quinto gol y Cristiano cerraría la faena con otro gol de penal y consiguiendo otro triplete para su palmarés personal.
