El clásico ya por sí mismo encierra las emociones fuertes de dos equipos grandes, le parezca a quien le parezca ayer las dos aficiones más grandes de nuestro país estaba en el reducto manudo o bien pegados a un televisor.
Eso nos hace pensar que los dispositivos de seguridad deben aumentar e incluso un equipo como Liga Deportiva Alajuelense debe contar con los servicios con las mejores empresas de seguridad, por la sencilla razón de ser el equipo que son punto.
Ayer se dio una situación como en cualquier parte del mundo, con el pitazo final del encuentro inició un tremendo pleito entre jugadores que intercambiaron unas cuantas palabras. Hasta aquí va lo normal por así llamarlo, lo que estuvo fuera de todo contexto fue la piedra que un aficionado le lanzo al jugador Douglas Sequeira impactándolo en la garganta. Aquí es donde quería llegar.
Fotografía Diario Extra |
Cuando vamos al estadio vemos un rótulo enorme en donde se describen los artefactos con los que se prohíbe a los aficionados ingresar, e incluso se hacen enormes filas en la supuesta requisa que se efectúa.
Al parecer no es tan eficaz puesto que a Walter Centeno un aficionado lo impacto con una moneda y se supone que nadie entra con menudo, y lo peor del caso como hizo un aficionado para ingresar con una piedra y no era pequeña fue bastante grande como para impactar al jugador de tal manera.
Me puse a pensar que no requisan bien e incluso algunos entran sin pasar por este control, por ejemplo los integrantes de las barras puesto que ayer tiraron en la cancha una véngala. La seguridad del estadio Alejandro Morera Soto en mi criterio s pésima, sumando a esto el hecho de que en medio pleito en lugar de tranquilizar los ánimos y evitar que se hiciera más se lucieron golpeando a camarógrafos, periodistas y fotógrafos.
Así como ellos hacen su labor, nosotros también y puedo decir que al estar dentro del pleito en ningún momento vi que nadie les faltara el respeto y mucho menos impidieran que ellos cumplieran sus funciones . Fue desagradable ver como un guarda de seguridad tomo por detrás al camarógrafo de canal 9 Jorge Mora, lo empuja al suelo y le quiebra la cámara que según mis cálculos podría estar valorada en unos $ 5 mil dólares.
Pero lo peor aquí no termina, un integrante de la Comisión de Prensa y Relaciones Públicas me dice que Douglas Sequeira tiene la culpa del impacto que recibió por provocar a la afición y quedarse en la cancha. Para suerte de los manudos el golpe no paso de un susto pero es increíble el poco humanismo que puede existir al mencionar semejantes palabras.
Aquí el punto del asunto es que la seguridad de Liga Deportiva Alajuelense no está cumpliendo su labor, es lógico que no están preparados para enfrentar una situación como la de ayer. Por otro punto, este mismo cuerpo de seguridad nos ha faltado el respeto infinidad de veces o al menos en mi caso personal. Recuerdo bien cuando un día bajo la lluvia me dejaron esperando afuera con el camarógrafo porque la muchacha de prensa no aparecía y al parecer había olvidado anotarnos en la dichosa lista.
En otra ocasión cuando me acerque en los últimos minutos en el espacio habilitado para entrar a la cancha y estaba hablando por celular me hicieron apagarlo, al mejor estilo de un banco.
Ojala que se tomen las medidas y no cuando pase una desgracia, que se preparen dispositivos de seguridad fuerte pero no en cantidad de personal si no en calidad y se les enseñe como enfrentar situaciones pero lo más importante que de verdad revisen a los aficionados y lo que estos ingresan al estadio.