Por Arnaldo Marrero
Los candidatos, los procesos y la poca credibilidad del fútbol puertorriqueño.
Pues sí, el Circo Presidencial, el mejor titular que podría ponerle a estas elecciones federativas para presidir la Federación de Fútbol de Puerto Rico.
Seis candidatos, 6 personas que no han sido capaz de unificar el fútbol puertorriqueño. Candidatos que se creen que por hacer una propaganda mal echa en las redes sociales «Otro fútbol es posible», ó que por escribir testamentos legales se pueden salvar de sus malos actos. Seis payasos que demuestran que no pueden trabajar juntos para un solo acto en este circo. Uno de esos seis, busca la forma de justificar su acto principal, el cual ha tendido 3 años para ensayarlo y que ahora se encuentra caminando en la cuerda floja. Otro parece estar pero la realidad es que su mejor acto es el de esconderse frente a la gente, el acto que nadie conoce.
Señores, y es triste que estos seis payasos, ni siquiera pueden llenar los zapatos de este espectáculo llamado fútbol.
Pero este «Circo Presidencial», es todo una analogía. Sabiendo que es muy probable que el proceso eleccionario sea uno corrupto y empañado de trampas.
Es por eso que creo que lo mejor que le puede pasar al fútbol boricua, es que la FIFA intervenga con un Comité Normalizador. Que vele por este proceso eleccionario y que ellos mismos eligan a los más capaces para presidir este Circo. Que la FIFA le busquen el manual de como hacer funcionar a una Federación y que la cumplan al pie de la letra para que recuperen la credibilidad.
Es triste saber que nuestro fútbol tiene más de 100 años de historia y que todavía no ha podido evolucionar. Hace falta cambios drásticos, gente nueva, mentes innovadoras. Nuevos payasos que puedan darle a Puerto Rico el mejor circo fútbolistico en la historia de nuestro deporte.
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Arnaldo Marrero González es productor-periodista para beIN SPORTS USA y Minuto 90 Radio (Radio Isla 1320AM)
NOTA: Los comentarios aquí hechos son del analista invitado. FBNET o FutbolBoricua (FBNET) Inc., no necesariamente se solidariza con las expresiones vertidas por el mencionado invitado.