A continuación las expresiones oficiales de la Sra. María Larracuente, exmiembro del Comité Ejecutivo de la Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF). Esta carta fue enviada el pasado viernes a los delegados de la FPF:
A TODA LA FAMILIA DEL FÚTBOL PUERTORRIQUEÑO
Reciban un cordial saludo. Durante los pasados días hemos visto de manera informal la propuesta de enmiendas a los Estatutos de la FPF que fueron aprobados en el 2016. La redacción de estos Estatutos tomó años y fue un trabajo en conjunto donde participaron en estrecha colaboración personal legal y gerencial de la FIFA, liderada por Gregory Engelbrecht, los Lcdos. James Johnson & Ruedi Brönnimann y James Fowler. Marco Leal y Andrés Portabella de CONCACAF y locales como los Lcdos. Homero González, José Brenes La Rocha y Jaime Lamboy, entre otras personalidades legales ligadas al deporte de Puerto Rico. El documento final fue difundido a TODOS los clubes miembros y a los diferentes grupos de interés dentro del fútbol. En aquel entonces, la Federación llevó a cabo visitas regionales donde le dió amplia participación en la discusión del borrador propuesto de los Estatutos a todos los clubes, ligas y grupos de interés de manera tal que pudieran ser parte integral en la discusión del documento que posteriormente se convertiría en la constitución que guiaría legalmente los destinos del fútbol en Puerto Rico. Inclusive, podrán algunos recordar que se hicieron vistas públicas con observadores de FIFA y CONCACAF que vinieron exclusivamente para ello. Durante todos los años que la FPF trabajó estos Estatutos se hicieron de cara a toda la comunidad.
En esta ocasión, bajo la administración actual de la federación y los miembros del Comité Ejecutivo, se han presentado sorpresivamente enmiendas sustanciales a los Estatutos vigentes casi pudiéndose decir que se tratan de unos nuevos estatutos que se habían estado trabajando a espaldas de toda nuestra comunidad del fútbol y por una persona que según se nos ha informado no guarda relación alguna con Puerto Rico. Esos propuestos estatutos aparentemente fueron difundidos hace pocos días a un grupo selecto del presidente de la FPF y se ha limitado la discusión de los mismos a algunos delegados con derecho al voto afines o que simpatizan con su dictatorial administración.
Familia de la comunidad del fútbol que estás leyendo esta comunicación dile NO a estas enmiendas que no sabes ni quién fue quien las preparó y que causarán gran daño al deporte que tu amas. La Constitución que regula un país o una entidad (que es lo que son estos estatutos federativos) no deben ser objeto constantes cambios por el gobierno o administración de turno. Cuando eso ocurre es un intento obvio de acomodar el documento a intereses personales, como es este ahora el caso con las enmiendas propuestas por Iván Rivera y su grupo.
Cuando se pretende enmendar unos estatutos, debe haber una amplia participación, evaluación y discusión con toda la comunidad del fútbol para aspirar a la equidad, aumentar y garantizar derechos, clarificar, especificar y democratizar procedimientos administrativos disciplinarios y electorales. Mantener los contrapesos de auditoría, fiscalización y transparencia. Éstas deben estar acorde a la realidad jurídica, constitucional y social del país. El documento que circula con las enmiendas adolece de estas características. Empezando con el tono ajeno a nuestra realidad idiomática, contradicciones, falta de precisión en la restructuración de procesos administrativos adjudicativos, el ignorar la jurisdicción del TAD y por ende del COPUR lo que puede implicar nuestra desafiliación del Comité Olímpico y más grave aún, algunas de las enmiendas son contrario a nuestro ordenamiento legal y constitucional como el discrimen por género por la estructura propuesta de votos y delegados y la eliminación de la Comisión Femenina. Que, de ser aprobadas, es una invitación a impugnaciones y pleitos legales. Lo cual pone en riesgo a la Federación ante la FIFA.
Las enmiendas propuestas son un serio retroceso para nosotros. Incluso, hay algunas cláusulas de un “cut and paste” de otras federaciones que ni siquiera están bajo el manto de CONCACAF. Como miembros de una organización que por años ha luchado día a día para echar para adelante el fútbol, la manera tan atropellada con la que pretenden aprobarlos es una falta de respeto y levanta varias tarjetas rojas. Merecemos más. EXIGIMOS MAS.