Este mes ha salido en la plataforma de NETFLIX el documental sobre la Selección Española de Fútbol y la polémica del beso robado por el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) a la estelar jugadora y Campeona del Mundo, Jennifer Hermoso. Si no lo han visto se los recomiendo.
En el mismo las jugadoras relatan cómo la RFEF discriminó contra el fútbol femenino, menospreciandolas y usandolas como un «token» para cumplir. Las jugadoras testifican como la RFEF intentó presionarles cuando las 15 renunciaron a la Selección en febrero del 2023, a solo meses del Mundial femenino. La frase que las jugadoras usaron para dejar saber su descontento con el trato de Rubiales y su equipo de trabajo fue #SeAcabó.
La forma en que la RFEF actuó tiene muchas similitudes con el modus operandi de la Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF) en general pero ese tema para otro momento.
En este caso deseo enfatizar en otra comparación. En febrero y marzo del 2024 la Selección Nacional de Fútbol femenina de Puerto Rico logró una gesta histórica de clasificar por primera vez a una Copa Oro de la CONCACAF. En la misma, Puerto Rico tuvo una derrota de 1-0 ante Brazil, victoria 2-1 ante Panamá y derrota 2-0 ante Colombia. Resultados sorprendentes e históricos.
Sin embargo, la FPF se olvidó del proyecto femenino por «La Base»; la Selección Nacional masculina de Puerto Rico. Desde abril las chicas no han sido convocadas para amistoso alguno a pesar de que han habido 3 ventanas internacionales femeninas donde la FPF pudo haber realizado convocatorias para el femenino. La Selección Nacional femenina tiene igual o mejor talento que «La Base», con mejores resultados hasta el momento pero igual a la FPF no le importa. Las mujeres se les convoca cuando conviene a la FPF de Iván Rivera.
Una FPF que realizó lo mismo que la RFEF, dejó fuera a las jugadoras que se quejaron y que exigieron mejores tratos como Karina Socarrás, Nené Zaragoza y otras mientras que recompensó a quienes le fueron leal al presidente Rivera como Laura Suárez. Ahora, ni siquiera a las que se trajeron de la diáspora que nos llevaron a la Copa de Oro se les toma en consideración. Entonces, Se Acabó. ¡Hay que exigir trato igual y justo para nuesta Selección Femenina!
El Mundial Brazil 2027 está a la vuelta de la esquina y CONCACAF tiene 4 espacios para clasificar directas y 2 que pasarían a un torneo clasificatorio entre todas las confederaciones donde solo adelantan 3. La CONCACAF arranca con sus clasificatorias bajo el W CONCACAF Championship el año que viene en octubre y noviembre.
A un año del comienzo de las eliminatorias parece ser que la FPF no toma en serio el fútbol femenino en Puerto Rico. En momentos donde la cantidad de jugadoras ha mermado en la Isla, cuando más se necesita una referente y visibilidad para ayudar a impulsar la práctica femenina en la Isla, la FPF prefiere amenazar a jugadoras con multas y sanciones por jugar un torneo no federado luego de que no hubiera un torneo femenino por un año. La FPF está más pendiente a monopolizar que visibilizar el fútbol de Puerto Rico.
Al fin de cuentas lo que a los federativos les importa es el dinero que puedan generar para su beneficio que el beneficio del futbolista puertorriqueño.
Este fin de semana juega la Selección Masculina que lo más probable no clasifique a la Copa de Oro masculina mientras que las que si clasifican no sabemos ni cuando tendrán su próximo amistoso. ¿Algún día jugarán la She Believes Cup? Siendo invisibilizadas lo dudo mucho.
El silencio es ensordecedor. La FPF poco le importa el fútbol femenino y definitivamente la equidad de género es algo que poco les importa. Después de todo, de Rubiales a Rivera, entre panas se entienden.