Hago esta columna pública porque entiendo meritorio que le llegue a la mayor cantidad de personas posibles, y si llega a Santurce, donde me llaman «mamab!@#$%» y por lo menos consideran los puntos válidos de la misma es un plus.
Nada contra el amigo Andrés Mirabelli, el gerente general de las Selecciones Nacionales, pero su trabajo no ha sido efectivo porque los gerenciales de la Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF) han estado más preocupados por destruir proyectos visionarios (pero de esto no se trata la columna, asi que me comprometo a no volver a traerlo a colación) de a futuro que darle los recursos que necesita el programa de Selecciones Nacionales para que sea exitoso.
Ciertamente estoy de acuerdo, en principio, con la filosofía de apostar por un cambio generacional. Pero como he dicho en varias ocasiones, los cambios generacionales no pueden ser de la noche a la mañana, y mucho menos sacando de su sitio a jugadores experimentados y veteranos que pueden darle confianza y seguridad a los chavales que vienen subiendo.
Tampoco es correcto que los gerenciales electos de la FPF continúen la práctica que tanto ha sido criticada en el pasado, la de presionar para que se escojan ciertos jugadores por encima de otros. ¿Es cierto o no? No puedo decir definitivamente si una o la otra, lo que si se es que el viejo refrán que dice «la mujer del César no solo debe ser casta sino aparentarlo» aplica en esta situación. Hay cuestionamientos de diferentes fuentes sobre el tema y por lo tanto estará la interrogante sobre ¿realmente es casta la FPF en esta situación?
Para que realmente tengamos un programa de Selecciones Nacionales, la FPF debe genuinamente permitirle al técnico nacional no solo que pueda escoger los o las jugadoras que el quiera sino también seguridad de que tendrá el tiempo necesario para cumplir sus objetivos. Actualmente los contratos de todos los técnicos de la Selección Nacional terminan su plazo en diciembre; si es que no se les han extendido a algunos el tiempo del contrato.
Debemos estar claro que el tiempo en el banquillo de Elgy Morales termina en diciembre. Eso es casi un hecho. La pregunta debe ser ¿por quién lo van a reemplazar? El de Parra ya terminó.
De inmediato hay una lista de varios nombres que se me ocurren, pero algunos no querrán dejar su finca por la inseguridad laboral que conlleva trabajar para esta administración. ¿Se acuerdan de lo que le hicieron a David Guillemat de ofrecerle continuar hasta diciembre condicionado a una exclusividad con la FPF para que luego le negaran la extensión? Otros, la verdad que no tienen el carácter moral de rehusarse acatar direcciones de la FPF que sean detrimentales para la Selección, o no tendrían el apoyo de una plantilla en el camerino. Otros simplemente ni serían considerados por la FPF porque están inmiscuidos en la política deportiva y no son del agrado de los gerenciales (algo así como me hechan de un lado a mi, pero peor porque estos tienen voto en la Asamblea que es donde cuenta).
La realidad es que solo hay un nombre que pudiera tener el respeto, no solo de los gerenciales, sino también de los jugadores. ¿Alguien sabe de la vida de Luis «Palomo» García? Su programa de SPDP Spartans, en cuanto a lo técnico, fue todo un éxito en su tiempo, y desde que salió de la dirigencia de los Criollos de Caguas hace varios años, no ha tenido vínculo alguno con un club.
Palomo logró lo que la Selección necesita hoy. Logró mezclar la experiencia con la explosividad y el hambre de los jóvenes. Cuando dirigió a Criollos se fue de tu a tu ante un plantel de profesionales como lo era el Puerto Rico FC en la Copa Luis Villarejo. Con jóvenes gano la Copa de la Excelencia III de la Puerto Rico Soccer League con el SPDP Spartans en el 2015, siendo este uno de los torneos más competitivos y bien organizado que ha tenido el fútbol de Puerto Rico en esta década. Palomo es respetado por jugadores veteranos y tiene las destrezas y el conocimiento para encaminar a los más novatos.
Si José «Cukito» Martínez tiene algo de interés genuino de sacar adelante el programa de Selecciones Nacionales, movería cielo y tierra para fichar a Palomo. Le ofrecería un contrato de 5 años como Director Técnico del masculino como del femenino, y dejaría que Palomo y Mirabelli trabajaran con autonomía. En 2 años estariamos en la Liga B, y en 3 disputando una Copa de Oro. ¿Lo van a llamar o seguirán pasando por alto el mejor técnico puertorriqueño que hay? Pero ¿estará Palomo disponible? ¿Donde está Palomo?