La semana anterior la selección olímpica de Panamá en un repechaje eliminó a los ticos de todo sueño hacia el camino de las olimpiadas de Londres 2012. Pero de qué nos extrañamos si solo recogimos un poquito del desorden que se maneja en la Federación empezando por Eduardo Li.
Siempre he considerado que Ronald González tiene sobradas condiciones como director técnico, mantiene un perfil bajo y a diferencia de muchos extranjeros que vienen “rajoneando” de su trayectoria, el simplemente deja que los hechos hablen por si solos.
De quién es la culpa de semejante fracaso que parece no encender las luces de alarma y seguimos viviendo del recuerdo de lo que fue la anécdota participación en Egipto 2009, cuando logramos un cuarto lugar mundial (lo más lejos que hemos logrado con un equipo nacional).
Para mí son responsabilidades compartidas, primeramente Eduardo Li. Como presidente de la Federación estaba en el deber de negociar con los equipos una vez que se conoció la negativa de que no prestarían a los jugadores para los entrenamientos.
Además de exigirle a Ronald González que con mucho tiempo de anticipación sabía que no contaría con las “ estrellas ticas” , buscar otras alternativas pensando siempre en la renovación y en darle oportunidad a jugadores cuyos equipos saben de la importancia de este tipo de torneos.
Los equipos, principalmente Alajuela y Saprissa ahora al mejor estilo de poncio pilatos salen a lavarse las manos y a ocultar una realidad que todos vimos, se negaron no una sino varias veces en prestar jugadores, es difícil trabajar sin las herramientas. Es mentira que facilitaran el trabajo en todo momento.
Pero en este punto viene otra parte, tanto Alajuelense como Saprissa están dependiendo de estas figuras porque las que ya estaban consolidadas ni para calentar las bancas las utilizan, digamos que todo es parte de un proceso. Donde los “chamacos” tuvieron que tomar las batutas de sus equipos para ver si acaso se hacía algo.
Pero la mayor parte del paste se la lleva Ronald, si el problema eran saprissa y la liga era tan sencillo como darse a la tarea de ir a otros equipos, en Costa Rica todos los equipos de primera y segunda división tienen ligas menores y no es posible que entre más de dos mil jugadores no salgan figuras capaces de sustituir a los demás.
Él planteo ambos juegos, tuvo pésima lectura del rival y del juego no supo como contrarrestar a Panamá, no aprovecho la ventaja histórica y estadística se dejo apantallar por un naciente país futbolero que ni los pañales se ha puesto porque está en ese proceso.
No culpo a los jugadores, son simplemente las víctimas de las malas decisiones tomadas en este país y ellos solo juegan donde los mandan. Culpo a los dirigentes de este país que al parecer no tienen la mínima idea de cómo manejar el fútbol.
Solo tienen idea de cómo salir a figurar en los medios de comunicación y rajar entre sus conocidos que conocen a medio mundo y son amigos del resto.