Jueves, 13 de junio de 2013
Edwin R. Jusino | Desde la Tribuna
Con el anuncio en la tarde de hoy del regreso del Puerto Rico Soccer League, como la Liga Profesional de Fútbol de Puerto Rico (LPFPR), es importante comentar sobre el mismo.
Los que me conocen y han seguido la trayectoria de mi desarrollo en este medio desde el 2008, he sido un
veraz defensor del profesionalismo en Puerto Rico. Pero, aunque si es cierto que la nueva LPFPR trae unos conceptos administrativos muy positivos, hay que plantear las siguientes preguntas: ¿Cómo van a financiar la liga? ¿Cuál es el plan de mercadeo? ¿En dónde queda la Liga Nacional?
Tras una conversación con un conocedor del tema, afirman que la Liga ya tiene auspiciadores o trabajan en conseguir auspicios. Muy bien, esperemos que se traduzca en una entrada real de capital para crecer el nivel del fútbol profesional. Pero el gravísimo problema que siempre hemos tenido en el fútbol es el mercadeo, y hasta el día de hoy, el problema continúa, aún dentro del seno federativo.
Si es cierto que la nueva Liga Profesional tendrá los boletos para la Copa de Clubes de la CFU, quedaría en la nada el actual torneo de la Liga Nacional; de hecho crea un conflicto directo, pues la Liga Nacional es quien ostenta dicho reconocimiento federativo al momento.
Es mi opinión que el anuncio de hoy de la Liga Profesional de Fútbol, aunque un tanto forzado, abunda a crear serios cuestionamientos de la unidad y capacidad de la Federación de trabajar hacia un mismo gol. De hecho, me suena demasiado de conveniente que hayan esperado a la salida del presidente federativo del territorio para filtrar los rumores del regreso de la LFPPR, para horas previas al programa de Minuto 90, confirmar oficialmente la liga.
Definitivamente se están viendo los movimientos pre-eleccionarios, pues Labrador ha sido el presidente que bajo su mandato, vio morir el profesionalismo en Puerto Rico. Primero dejó morir la primera versión de la Puerto Rico Soccer League, y más reciente el receso de los Puerto Rico Islanders FC, el único equipo profesional que puso a Puerto Rico en el mapa de la CONCACAF. Los únicos dos logros que Labrador puede realmente achacarse son: el derrocamiento de Jack Warner, y el fichaje de Jeaustin Campos.
Durante el programa de hoy de Minuto 90 los colegas hicieron un excelente análisis de la nueva liga profesional. Pero quisiera aclarar que José Serralta no está en ninguna condición para aspirar a la presidencia de la Federación. Sus problemas de salud son tales que nada más contemplar un regreso de Serralta es insólito y altamente dudable.
¿En que quedará esta «disputa»? Veremos, porque una Federación que entró desde un principio dividida, ya da señales de fricción interna. Entre las filtraciones que han ocurrido sobre las finanzas de la Federación, y ahora la “nueva” Liga Profesional, solo queda ver el desenlace final de todos estos eventos conectados el uno con el otro.