Lunes 5 de diciembre de 2016
Edwin R. Jusino | Desde la Tribuna
Primero que nada, comienzo esta columna felicitando a los jugadores del equipo de la UPR de Mayaguez por lograr la gesta de tener el primer campeonato desde el 1998. Ustedes son merecedores de eso y mucho más, ya que conozco del talento y las destrezas de los jugadores, por referencia o por que los he visto jugar. También felicito al Director Atlético de la UPR Mayaguez, que definitivamente, se ha interesado por el fútbol y le ha dado la importancia que merece.
Dicho eso, Abner Rodríguez logró el campeonato a pesar de el mismo. Un reloj roto ciertamente está correcto dos veces al día, y dice mucho que las juanas en a 4 años de haber comenzado el programa femenino, hayan obtenido un campeonato y que en los casi 10 años o más que el profesor Rodríguez está al mando del Colegio solo haya logrado 1. Los resultados hablan por si mismos y no se necesita seguir dandole a un caballo muerto.
Lo interesante de todo esto es que me veo casi obligado a escribir esta columna como reacción a un payolero y moldío, como le llegó a decir en su día DePlaymaker. Le sugiero al Sr. Vázquez Muñiz, con todo el respeto que se merece, que madure un poco y deje de pintarse como el más grande. Por experiencia propia, cuando se nos van los humos a la cabeza, nos pasa como a Icaro.
¿Por qué digo que me veo casi obligado? Porque como dije, no quiero seguir dandole a un caballo muerto (el tema de Rodríguez), pero aparentemente el telereportero, en una perreta de niños, le dolió que este medio le cediera un espacio al Sr. Cornejo, para que este se defendiera de unas alegaciones hechas por Vázquez. La pregunta deber ser ¿si yo soy un «pseudo periodista» por que le importa lo que yo diga o escriba en mi medio? Despues de todo, usted es un cotizado periodista deportivo en Telemundo.
Tomaré mi propio consejo, y espero que esta sea la última columna donde tengo que hacer referencia a una persona tan tóxica como usted.