06/08/2012
Por Pablo Aro Geraldes | @arogeraldes
Goal.com
Hasta Santa Fe llegó Fernando Parces, de la Escuela de Futbol Taurinos de Cayey, quien ya comienza a adaptarse a su nuevo entorno: la «Casa del Jugador» en el Club Atlético Unión de Santa Fe. Es el primer joven de ese país que se suma a este tipo de programa de entrenamiento avanzado con un club de primera division de la AFA. Se quedará hasta diciembre.
En una carta al portal puertorriqueño Saque de Meta, Denis Parces, su padre, cuenta cómo es el proceso de su hijo en Unión: «Con este paso, Fernando espera ser el que abre la puerta a que otros talentos boricuas como él, del deporte de más crecimiento en Puerto Rico, puedan realizar su sueño y jugar al más alto nivel. De inmediato Fernando se enfrentó a la velocidad de juego y el nivel técnico de sus pares, el cual es excepcional. Fernando estará participando en la Novena División de la AFA, con otros chicos nacidos en 1998… El nivel de competencia es altisimo».
Los puertorriqueños valoran el nivel del fútbol argentino y saben que en estas tierras podrán apostar al progreso de sus juveniles. «La idea es abrir un puente entre Unión y nuestra isla, compartiendo de esa manera el alto nivel técnico y táctico de un país que, sin duda, es una potencia mundial en el deporte del futbol».
Pablo Secrestat, técnico de la Novena, comentó que Parces es un «doble cinco suelto con creación». Estel vocabulario es nuevo para Fernando. Su padre contó, con marcado agradecimiento, el presente de su hijo en Santa Fe: «lo atienden de maravilla. La pensión cuenta con encargados que residen allí, el matrimonio de Jorge y Maria Pesci. Antes de cada entrenamiento, Fernando acude a la utilería, donde le dan su uniforme de práctica, el que luego devuelve para que lo laven. Varios de los días se entrena a doble turno, por la mañana y por la tarde, con sesiones en el gimnasio del club. Cuentan, además, con nutricionista, psicóloga, trabajadora social, médicos y demás personal para atender a los jóvenes talentos. Este lunes Fernando comienza sus sesiones de colegio, las cuales generalmente son en la noche».
«Por lo demás, como padre, estoy maravillado con el calor humano y el cariño con que han recibido a mi hijo. Acá estará abriendo el camino a tantos otros como él que tenemos en Puerto Rico!», concluye don Parces.
Ya sabemos, si dentro de unos años, una estrella despunta en el Caribe, habrá que hacerle un guiño de agradecimiento a la gente de Unión.