El equipo de Inter Miami CF entra en una etapa de purgatorio. Tras perder 2-1 la final del U.S. Open Cup contra Houston, y con necesidad de ganar y sumar puntos para llegar a playoffs de la MLS, la otra competencia en sus miras, el club sensación de la liga, enfrenta una realidad sin dos fichajes que aportaron dosis de magia ofensiva al equipo – Lionel Messi y Jordi Alba.
Menos evidente, pero más numeroso, es la cantidad de seguidores que quedan decepcionados en su peregrinaje a ver a Messi más que al equipo. Entre ellos, varios boricuas.
Con Messi (de 36 años) entre algodones, y Alba fuera por tiempo indefinido, el calibre ofensivo del equipo queda disminuido. Queda Sergi Busquets, el otro ex del Barcelona, como el faro conductor del equipo en la cancha.
Pero Inter Miami, y el Messi show, son el atractivo permanente. Contra Houston, tal vez había más estrellas en la zona VIP y tribuna que en la cancha. Previo al inicio, Messi fue descartado para jugar, por la molestia en la pierna que lo obligó salir contra Toronto el 20 de septiembre. Se perdió la derrota de Miami contra Atlanta, y la final contra Houston fue el tercer partido que se pierde (con la selección no jugó contra Bolivia el 12 de septiembre). Hinchas como Alfonso Simán, que viajó desde El Salvador para el partido, se quedaron con las ganas.
Sí se pudo ver a Lionel Messi con su familia en la zona VIP, y a Jordi Alba en el próximo palco. Al costado, Zinedine Zidane y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, llegaron de sorpresa y sin aviso previo y como siempre, David Beckham, esta vez con su padre. También, James Harden (jugador de NBA y accionista del club de Houston), y Cindy Parlow Cone, presidente de U.S. Soccer y campeona olímpica en Atenas 2004. Harden, que no ha ganado títulos en la NBA, ahora puede ostentar uno como dueño de equipo.
Pudo haber sido por goleada. En la primera mitad, Houston tiró 15 veces al arco, y Miami solo tuvo uno. Las incursiones de Amine Bassi y Griffin Dorsey fueron contundentes y la lucha y cobertura del panameño Adalberto ‘Coco’ Carrasquilla resultó fundamental. El colombiano Luis Quiñones fue una pesadilla para DeAndre Yedlin, quien le cometió un penal. For the record: Goles de Dorsey (m. 24) y Bassi (m. 33 penal), y en los descuentos el 2-1 Josef Martínez.
Pero hay otro tema, aparte de que Miami armó la fiesta, y Houston la celebró y mereció ganar. El entrenador de Miami, Gerardo ‘Tata” Martino, admitió que Houston fue mejor, y se escudó en las lesiones y desgaste que marginaron al astro Lionel Messi, y a Jordi Alba, contratados a mediados de temporada. Pero tal vez la falta de pretemporada y la seguidilla de partidos seguidos a ‘matar o morir’ le pasó factura al club. Messi se saltó su tercer partido seguido,
Tal vez, Martino corrigió y modificó el equipo demasiado tarde.
Al quedar sin Messi y Alba, Miami no pudo perforar la defensa de Houston ni suplir balones para Martínez ni Campana, sus dos delanteros. Al alinear a Gómez y Cremaschi. “Sacrificó al ecuatoriano Dixon Arroyo que es el guardaespaldas de Busquets”, opinó Luis Sánchez, periodista que cubre el equipo desde sus inicios. Miami tiene 32 puntos, cuatro menos que DC United, en la última posición para la postemporada.
En conferencia, Ben Olsen manifestó que Miami es “el equipo más sexy” en la historia de la MLS, pero que Herrera era tan importante para el equipo como lo es Messi para Miami. Y los festejos manifestaron que el mexicano, ex del Atlético de Madrid, vino a sumar títulos, y se lo gozó plenamente.
Houston se suma a una lista de clubes que han obtenido el campeonato MLS y la U.S. Open Cup repetidas veces. Más de 200 clubes profesionales y amateur participaron (según U.S. Soccer), y la U.S. Open Cup, disputada desde 1914, es el tercer certamen más antiguo del mundo.
“Estoy decepcionado. No sé si quedarnos y tratar de ver a Messi en el próximo juego”, dijo Fabián Gómez, de Arecibo, vestido con la camiseta rosa de Miami. Viajó con su amigo Juan Nassar, también estudiante de medicina en Puerto Rico. Gómez, que lamenta la falta de partidos de envergadura en la Isla, recuerda los Islanders y haber visto la visita de los campeones del mundo, España, en el 2012. Busquets también estuvo en ese partido.
