| Domingo, 07 de Agosto de 2011 www.everardoherrera.com |
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Campos envió la siguiente carta a los medios de comunicación:
La temporada pasada llegue cargado de ilusiones al equipo que me vio nacer como futbolista, aferrado a mi ideología de tratar de ser el mejor en lo que se hace y salir a ganar los partidos sin importar el rival que se tenga al frente.Impregne dentro de los jugadores y cuerpo técnico una mentalidad ganadora, el tener claro que no basta decir “queremos ser campeones”, si no trabajar como lo hacen los grandes, pelear hasta el último minuto el resultado, no conformarse con poco, levantarse con dignidad después de una derrota y tener la humildad de reconocer los errores para encontrar la manera de corregirlos.
Pero ante la falta de capacidad dirigencial y al carecer de un eficiente manejo administrativo, el cual no quisiera entrar en detalle, se desarrollaron ciertas situaciones que no se amoldaban a los objetivos principales del plantel. Sin embargo insistí en quedarme porque confío en mi capacidad y experiencia, pensé que cambiarían y así lograr las metas establecidas.A pesar del compromiso profesional por parte mía, cuerpo técnico y jugadores de trabajar de manera responsable, en hacer las cosas bien y de esforzarse el doble para alcanzar resultados positivos, las circunstancias cada vez se tornaron más difíciles.
El domingo anterior, horas antes del primer partido de campeonato frente a Liga Deportiva Alajuelense y después de analizar las situaciones que se venían arrastrando y sobretodo ver que no había una mejoría decidí dejar a disposición mi puesto.Por respeto a mis jugadores y compañeros del cuerpo técnico y con el fin de no alterar la estabilidad del grupo (porque un juego como el que se hizo el domingo es para olvidar y era necesario recuperar rápido el ánimo y la parte física del grupo), decidí hacer pública mi decisión hasta el día de hoy. El martes anterior me reuní con los miembros de Junta Directiva, expuse mis puntos y hable sobre las situaciones en las que a mi parecer no eran las indicadas para alcanzar los objetivos propuestos por el plantel y mucho menos se acoplaban con la mentalidad ganadora que impregne.
Durante esta semana trabaje con normalidad con el equipo debido a los dos compromisos importantes que se avecinaban (contra San Carlos y Puntarenas) y también para que las partes encargadas buscaran a la persona que me reemplazará.
Quiero agradecer a los miembros del cuerpo técnico, cada uno durante el tiempo que estuve al mando me brindo su apoyo y confianza. Durante este proceso fueron un pilar fundamental.
A los jugadores, porque en cada partido demostraron coraje, convicción y sobretodo porque confiaron en mis ideas y planteamientos, supieron entregarse de lleno con el único fin de pelear todos juntos por el mismo objetivo.
Y por último a la afición de Pérez Zeledón, desde que llegue a esta tierra me he sentido como en mi casa, primero durante mi instancia como jugador y ahora como entrenador. Por el apoyo que me dieron a mí y al equipo domingo a domingo y a todas aquellas personas que muchas veces veía en la calle quienes me regalaron palabras llenas de motivación para salir adelante.
Se despide
Jeaustin Campos Madriz
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