lunes, 9 de mayo de 2011
Esteban Pagán Rivera / Primera Hora
El viaje a Surinam fue un poco más complicado que lo esperado para los Islanders de Puerto Rico, pero el resultado ayudó a tomar otro paso hacia la Liga de Campeones de la Concacaf.
Los Islanders llegaron ayer a suelo boricua luego de conseguir un luchado empate, 1-1, en su visita al Walking Boyz de Surinam el pasado sábado en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa de la Unión Caribe (CFU, por sus siglas en inglés).
El defensa Jamie Cunningham marcó el único gol de los naranja.
“Sabíamos que no iba a ser un partido fácil, pues los técnicos ya los habían visto jugar”, expresó ayer el defensa boricua de los Islanders, Richard Martínez.
“El largo viaje del día anterior, la humedad y el campo, que no estaba en las mejores de las condiciones, nos complicó el partido”, abundó Martínez.
Así las cosas, los Islanders buscarán el pase a la semifinal del torneo el próximo sábado, cuando reciban a Walking Boyz en el estadio Juan Ramón Loubriel de Bayamón.
El gol marcado en Surinam ayuda la causa de los naranja, pues bajo reglas del torneo, el gol visitante tiene doble valor. Por ende, si la eliminatoria termina con marcador global empatado, el equipo con más goles como visitante adelanta a la semifinal del torneo.
La Copa de la CFU, ganada por los Islanders el año pasado, otorga tres boletos a la Liga de Campeones.