Lunes 26 de marzo de 2018
El pasado sábado el Sr. Eric Labrador, presidente de la Federación Puertorriqueña de Fútbol (FPF), anunció sin decirlo su candidatura a lo que sería su último cuatrenio a la cabeza de la FPF.
Labrador dió un discurso de unos 15 minutos detallando cada uno de sus «logros» del pasado año. Presentó a los miembros de la Asamblea las acciones que había tomado posterior al Huracán María para traer $500,000 en fondos de emergencia y ayudar en la reconstrucción de las sedes, y que de esa partida $200,000 son para la reconstrucción del Estadio Juan Ramón Loubriel.
Se informa que una comitiva de CONCACAF y FIFA visitó la isla post-María para la aprobación de $500,000 en fondos de ayuda de emergencia 🚨 para reconstrucción de infraestructura #AsambleaFPF
— FutbolBoricua (@FutbolBoricua) March 24, 2018
Presentó a la Asamblea General el progreso que se ha realizado en cuanto al Proyecto GOL, no perdona, el Proyecto FORWARD (porque FIFA ahora le ha cambiado el nombre pero sigue siendo el Centro de Desarollo del Oeste).
Labrador estipula que el Centroamericano será parte del Centro de Capacitación del Oeste y que se va a estar haciendo los cambios para tener el estadio certificado por FIFA. #AsambleaFPF
— FutbolBoricua (@FutbolBoricua) March 24, 2018
Con su espesa barba, sus espejuelos, y unas cuantas notables libras de menos, Eric se escenificó como el candidato de la experiencia. Como buen caudillo, presentó su obra para dejar que su obra hablase por el mismo.
Presentó un presupuesto desglozado con partidas más que favorables para invertir en el fútbol. $375,400 para las Selecciones Nacionales sin incluir las partidas adicionales que FIFA ahora envía para pagar los viajes de las selecciones ($364,000) y de equipamiento ($150,000), $220,000 para proyectos femeninos, $105,325 para invertir en el fútbol base, $239,524 dividido en 4 torneos federativos; como lo explicó Labrador, parecería ser que el tiempo de vacas flacas ya se acabó.
Todo el montaje de la Asamblea fue elaborado para exaltar la figura de su presidente, y asegurar la continuidad de los proyectos en marcha por los próximos 4 años.
Solo que no todo es lo que aparenta, ni todo fue acorde al plan. Por razones que desconozco, y que por lo tanto ni me atreveré a especular, la Asamblea no contó con todos los delegados necesarios, por lo que tuvieron que activar una sección de los estatutos que permite tomar decisiones sin quórum en una Asamblea Extraordinaria debidamente convocada. Al teatro del Museo del Deporte en Guaynabo solo llegaron 14 delegados, y el mínimo de quórum son 19.
¿A que se debe esto? ¿No hay interés en los asuntos federativos o es que la figura de Eric Labrador está desgastada ante la opinión de la comunidad del fútbol boricua? Recordemos que Labrador solo ganó por un voto en el 2014, que equivalió un 35% de los votos de aquella Asamblea. Por tanto su base no es grande por si sola.
Teniendo en cuenta que allí estuvieron 2 potenciales candidatos a retarle, estos siendo Alberto Santiago, presidente del Bayamón FC y miembro del Comité Ejecutivo, y Artemio «Temo» López, delegado de la Asociación Metropolitana, ya de por sí el evento tenía sus conotaciones políticas. El hecho de que Santiago no tomase su silla en la mesa presidencial es un intento, consciente o inconsciente, de distanciar su figura de la de Labrador.
Y hay razones porqué.
El presupuesto, en papel, es excelente. Un 75% del mismo está dirigido hacia el desarollo del fútbol. Pero una cosa es lo que se escribe en un papel y otro la ejecutoría. Hasta el momento, el estilo de «micromanaging» que impone Eric Labrador le ha traido problemas. La FPF no ha terminado en positivo un solo año desde que el ha estado a la cabeza del organismo.
La FPF ha estado tomando facultades de las cuales no deben ser de su competencia, como por ejemplo, el de organizar torneos federativos a expensas de las diferentes ligas que son las que han estado desarollando el fútbol, a pesar de que no ven ni un solo centavo enviado por la FIFA. De los $239,524 que están destinados a los torneos federativos (Torneo Preparatorio 2018 masculino, Liga Nacional 2018-2019 masculina, Liga Nacional 2018-2019 femenina y la Copa de Campeones de categorías juveniles) solo $83,914 están destinados para los torneos en si. Practicamente cada torneo tiene asignado $20,978.50 para gastos no operacionales, ni de compra de material ni equipo.
Aún así, los clubes que han optado por participar del Torneo Preparativo se les ha cobrado su insripción. No hay un esfuerzo claro de mercadear el torneo, ni un esfuerzo de hacer llegar la información de los torneos al público en general más allá de Twitter.
Es una pena que Labrador vea a la Puerto Rico Soccer League (PRSL) como un enemigo, y no como un socio que, en buena fé, está intentando levantar el fútbol profesional de la manera correcta. Cuando más apoyo necesita su candidatura, es cuando más puentes ha decidido quemar el Sr. Labrador. Si Labrador hubiera analizado el asunto con más detenimiento, se hubiera percatado que el proyecto que estamos impulsando desde la PRSL tiene base, fundamentos, y la inversión privada necesaria para sacar del atolladero el fútbol elite de este país.
Creo grandemente que Labrador erró en lanzarse a querer controlar, o dirigir, la primera división de este país, que lo expone en un año de elecciones a que su imagen que no está sólida se desgaste aún más. La culpa no será de la Directora de Torneos, Carolina Betalleluz, la culpa al final será de Labrador porque así funciona la perspectiva y la opinión pública en Puerto Rico. Los caudillos o gobernantes son responsables de los aciertos y desaciertos de sus sub alternos.
Además, el mundo profesional se está moviendo cada vez más a que las ligas profesionales sean mancomunadas, autónomas, y sin ascenso y descenso. Pero eso es tema para otra columna. Mi punto es que la FPF no tiene el personal capacitado, ni los contactos en el sector privado para embarcarse en una gesta similar.
Durante el cónclave se afirmó lo que escribí en una columna anterior de que el fútbol femenino ha decaido.
Se informa que ha habido una baja en el fútbol femenino de clubes y jugadoras #AsambleaFPF
— FutbolBoricua (@FutbolBoricua) March 24, 2018
Me alegro que se haya asignado $220,000 para desarollar el fútbol femenino pero si no hay unos cambios en el equipo, no importa cuanto dinero tires al problema, no se va a resolver. El fútbol puertorriqueño es como un hombre pobre que se ha ganado la lotería. En par de años desperdicia todo el dinero, porque no supo administrarlo bien.
Y ahí está la clave. Rita Mae Brown escribió que «la definición de la locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener diferentes resultados».
Despues de casi una década al mando del fútbol puertorriqueño, Labrador, como cualquier caudillo tradicional, no va a cambiar su estilo de administración.
Y a pesar de haberme tomado el tiempo de delinear todas estas cosas, nadie de los que han dicho publicamente que van aspirar a la presidencia, tiene la habilidad de crear un consenso para derrotarlo. Por tanto, parece ser que Labrador seguirá a la cabeza de la FPF por un último cuatrenio y un poco más. Pues la elecciones están pautadas para el primer trimestre del 2019 debido a los cambios en los estatutos de la FPF.
“Disclaimer”: el autor es el Oficial de Prensa de la Puerto Rico Soccer League.