
De izquierda a derecha, Alberto Ramos (gerente general de la Selección Femenina), Sergio Castro y Oscar Rosa conversan entre sí previo al partido de anoche en el Loubriel. (Para Primera Hora / Rafael Pichardo )
sábado, 20 de marzo de 2010
Esteban Pagán Rivera / Primera Hora
Desde finales del año pasado, trabajaron arduamente para el partido de anoche. Sin embargo, a la hora de rodar el balón, Oscar Rosa y su cuerpo técnico vieron el partido desde las gradas del estadio Juan Ramón Loubriel. Y es que luego de diferencias con el presidente de la Federación Puertorriqueña de Fútbol, Joe Serralta, Rosa y su cuerpo de trabajo decidieron renunciar a la Selección Nacional Femenina a par de semanas de iniciar la fase caribeña de la Copa de Oro de la Concacaf.
Anoche, luego de semanas de esconder su frustración, Rosa habló con Primera Hora sobre qué fue lo que verdaderamente pasó. Según el técnico boricua, Serralta quiso imponer cierta cantidad de jugadoras desarrolladas en Estados Unidos, en sustitución de talento del patio que entrenó desde finales de diciembre.
“Él (Serralta) ha hecho unos compromisos con estas chicas que él ha traído de afuera, a tal grado que nosotros no sabemos. Pero, él sabe que a mí no me va a manipular”, compartió Rosa previo al partido de ayer de la Selección en el Juan Ramón Loubriel de Bayamón.
De hecho, de las 18 jugadoras convocadas para el partido de anoche, solamente cinco eran del grupo identificado por el asistente de Rosa, Sergio Castro, como las chicas que se desarrollaron en Puerto Rico.
Incluso, Castro sugirió que Serralta tenía el interés de acomodar futbolistas representadas por su hijo, Joey Serralta, quien es agente de jugadoras de fútbol. Rosa y Castro coincidieron en que no era necesaria la inclusión de tanta futbolista desarrollada en Estados Unidos en el combinado de Puerto Rico.
“Las muchachas locales tienen el talento y la capacidad. Como todo, no descartamos traer tres o cuatro de Estados Unidos como un tipo de columna vertebral, uno tiene que ser realista, hay posiciones que en Puerto Rico no existen. Pero no traes 20”, dijo Castro.
Rosa y Castro hicieron hincapié en que las jugadoras locales podían cumplir con la fase caribeña de la Copa de Oro de la Concacaf. De hecho, en un partido amistoso, la escuadra sub-17 del Albergue Olímpico de Salinas derrotó a San Cristóbal y Nieves -el rival de anoche-, 6-1.
Serralta los desmiente
Por su parte, Serralta negó tajantemente lo expresado por Rosa y Castro. Según el presidente de la FPF, la renuncia del cuerpo técnico fue por “diferencias de ideales”.
“Yo no impongo jugadoras. Yo sí recluto y las traigo, y si pasan el proceso, están. Tan sencillo como eso. Aquí el objetivo es tratar de conseguir las mejores jugadoras para que ganen, no imponerlas”, subrayó Serralta.