Aparte de la gente que ahora llega de todo el mundo a ver el club floridano – incluyendo desde Ponce – como novedad, ahora toca ver los verdaderos quilates deportivos que presenta el Inter Miami CF y el equipo de consagrados Lionel Messi, Sergio Busquets, Jordi Alba y Luis Suárez.
El miércoles 13 toca en Fort Lauderdale contra Nashville (8:15 p.m. en Chase Stadium). Es el partido de vuelta de la copa continental y presenta el primer verdadero reto.
En el elenco de prioridades entre las cuatro competencias en disputa, vencer la Concachampions catapultaría al Inter Miami a la legitimidad en el panorama de la región y hacia el Mundial de clubes. En el camino están clubes poderosos como América, Guadalajara, Tigres y el Monterrey mexicanos. Aparte de un puñado de clubes importantes de Centroamérica (algunos ya eliminados), se decanta como otro duelo entre MLS y Liga MX (México). Falta superar tres rondas para llegar a la final.
En la ida, Miami empató 2-2 con fortuna y un gol al final de Suárez. Pero la figura – con dos golazos para Nashville – fue Jacob Shaffelburg. El nombre es alemán, pero el pasaporte es de Canadá y hay que supervisarlo.
En Nashville, hubo un momento de terror a nivel Richter que se sintió desde Argentina hasta Nueva York, cuando Messi recibió un planchazo a los 77 que dejó al argentino retorciéndose en el suelo por un par de minutos. El que más fino está es el charrúa, y fue Suárez quien marcó el gol del empate de un centro de Busquets.
La nueva versión del Inter Miami CF, agarra ritmo durante el inicio tras una gira internacional que no cumplió un rol deportivo útil más allá de vender camisetas.
Parece un equipo copero, que resuelve resultados. Pero para esta coyuntura tempranera tiene que entrar en ritmo rápidamente. Porque depender de la conexión Barcelona – Suárez, Messi, Alba, Busquets y Cia. – puede ser una fórmula peligrosa cuando vengan lesiones, suspensiones o decepciones.
En la cancha, Messi regula y juega unos 20 de los 90 minutos a full. Hay desajustes en defensa, expuestos por los goles de Montreal y retos. Integrar a Federico Redondo, recién llegado de Argentina y con debut en Nashville. Además, se deshicieron del defensa DeAndre Yedlin y dos mediocampistas brasileños para abrir cupo en los salarios. El director deportivo, Chris Henderson, tendrá que encontrar un carrilero derecho para sustituir a Yedlin.
Pero Miami viene de una derrota, 3-2 en liga contra Montreal. Fue un descarte donde probaron jóvenes y la profundidad de plantilla. Miami empató 1-1 con el ecuatoriano Campana, pero Montreal anotó dos goles en cuatro minutos (75 y 78), algo que indica una laguna en concentración y táctica. Busquets y Suárez entraron como suplentes para ‘resolver’. Alba anotó de pase de Busquets a los 81, pero no bastó.
Messi, que es mortal pero también un talento divino, observaba y tomaba mate con su familia en una camisa estampada en blanco y negro. Un helicóptero sobrevoló la cancha con tres jóvenes turistas tomando fotos con sus celulares para ver el equipo dorado de los Estados Unidos.
Concachampions presenta algo de lo mismo de Leagues Cup, improvisado en 2023 para aprovechar la mega contratación de la “Pulga” rosarina. La diferencia: la presión y emotividad de un certamen de eliminación directa entre equipos cara a cara.
Mientras tanto, en la copa de campeones de Asia, Cristiano Ronaldo también le tocó sufrir, pues Al Nassr saudí fue eliminado el lunes en cuartos contra Al Ain en la competencia análoga de Asia. (Ahora, «Quo vadis, Cristiano”?)
¿Inter Miami está hecho de Solid Gold? ¿O es sólo un enchapado atractivo? Y más importante aún: ¿Cuál es el plan B si Messi-Miami quedan fuera del torneo continental? Algunas respuestas vendrán contra Nashville. Llegó la primera hora de la verdad.
Keyvan Antonio Heydari es un reportero con más de 25 años cubriendo el deporte internacional. @keyvanantonio
